La filosofía, como alternativa de los prejuicios y las ideas preconcebidas a los que no hemos llegado en el ejercicio de nuestra libertad, es una forma de ver la vida, una forma de actuar en ella, tolerante y abierta para cada uno de nosotros siempre y cuando intentemos llegar a planteamientos certeros y con rigor, respaldados por razonamientos válidos.
La filosofía llega a ser un refugio, donde consolarte si un día te invaden las preguntas y no puedes abarcarlas, un arma para saber argumentar, para poder respaldarnos y para ser críticos, (con nosotros mismos y cuanto nos rodea), un vicio y un entretenimiento al saciar tu sed de saber, pero es, sobre todo, una maestra que te da los instrumentos para valerte por ti mismo.
Firmado, Mme. Parapluff.